martes, 6 de enero de 2009

UNA SUERTE DE VERDAD

CUENTO SURREALISTA Y CONTINUACIÓN DE: “LAS REALES ARMAS MORTALES PSICOLOGICAS”. RELATO INTROSPECTIVO DE JOHN.


“La actividad paranoica-crítica; le permite al mundo delirante pasar al plano de la realidad”
Salvador Dalí


Un cúmulo de imágenes que tengo en mi mente; y que no puedo describir pero sí sentir; ya que ellas desfilan en mi interior junto con el aire que entra por mis pulmones. O mejor dicho queda en ellos, pasando por mis fosas nasales al lugar donde debe llegar; y, me envuelve toda esta inmensa oscuridad que pareciera ser eterna en mi interior. Y también el ambiente se torna como el color de la noche; y es porque no puedo ver nada, y sin embargo, quizás me encuentre en el mejor de los estados humanos. Como la roca pero con respiración, o como un reptil que se baña con el sol; pero carece su presencia y es porque ahora es innecesaria la naturaleza que lo establecido, de ese modo, y vaya a saber uno como se congela la escarcha de esos días de invierno caluroso. Y quien le enseño a nadar al mar y ondularse; o a un pez a nadar o a un ave a volar, o al viento a volar, y ¿adónde se retira la sombra? Me gustaría conocer ese lugar, quizás estoy en él y no me doy cuenta; no sé si estaré vivo, pero sí siento al corazón palpitar pero ¿qué garantía me da eso? Sé que puede sentir pero ahora no amar, y un golpe con agua rompería este maravilloso mundo; en el que estoy con la tranquilidad, que es el cielo abrasador. Sé que eso es señal de muerte; pero llegará algún día tarde o temprano, quizás ya llegó y yo ni lo sepa, espero que no sea así, aunque ¿quien me puede decir lo contrario? Si viajo llegaré a alguna parte; pero sé que no puedo mover un músculo, bueno no me puedo mover pero no del todo y voluntariamente y la oscuridad me acosa, y no le temo pero sí la respeto; pues sé que es exterior e interior. Claro que toda oscuridad posee elementos ajenos a la interior; pero esta última ha sacado elementos y fragmentos de cosas y vivencias, y/o recuerdo de la exterior y la interior. Es como ese astro que sale de noche, que logro divisarlo unas horas antes y tenía la forma de una moneda blanca; mientras alguien en una esquina pensaba o fumaba, o tal vez tomaba un trago en algún bar, el “Batallas” donde anida la confianza. Y ¿tendrá tanta fuerza como la fe o la primera la sobrepasa?, ¿y la voluntad?, ¿nos permite ser realmente nosotros mismos? ¿En realidad la tenemos?, ¿o la perdimos como a veces hacemos con nuestro tiempo?, ¿Algún día a alguien, se le ocurrirá inventar una máquina que pueda controlarlo?, ya que esos artefactos de muñecas solo marcan nuestra impuntualidad; porque no se pude a veces ser preciso, ni siquiera ese pequeño mecanismo que llevamos en la muñeca; pienso que no. Un bello campo acompañada con un arroyo y un río, porque cruel destino que tuvieron José Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán, junto con toda su generación como me lo contó el gitano Melquíades en su libro escrito en latín “las estirpes condenadas a cien años de soledad; no tendrán otra oportunidad en la tierra”. Tener “cien años de soledad” pero no tener tiempo para quererse ni amarse, es un destino cruel y despiadado. Como lo escribió Gabriel García Márquez. Parecido al que tuvo Alberto Cova; que lo devoró la selva de Colombia. En La vorágine de José Eustaquio y la Rivera. Y todo esto me da un miedo enorme; ya que a veces le he tenido un cierto temor al futuro o destino, de pensar que Augusto Pérez, una persona que ponía en juicio los usos de un paraguas en un día de lluvia, se reveló contra Miguel de Unamuno su creador; en su nivola Niebla. Porque este ultimo lo iba a hacer morir, y Augusto pone en dudas ambas existencias; luego de volver de Salamanca, por cenar de una forma indebida, y muere de hipocresía igual que su perro Orfeo que murió de pena al ver a su amo fallecido, y el criado Domingo dice ante esto, “Luego dirán que las penas no matan”. Entre sollozos y lamentos. No debemos olvidar que el odio también es un sentimiento humano, como el amor y la piedad. ¿Existen?. Creo yo que sí, entre otras aún suena en mi cerebro por intermedio de mis oídos y mi memoria auditiva. Ya que tengo ese sonido de la estridente música en inglés que es el rock, como un eco dentro de mí; que suena y resuena a lo largo de este agradable transcurrir que terminará no sé cuando porque no se donde estoy. He perdido la razón y la voluntad aunque pierda un partido de fútbol, o una mano de naipes; es más importante conservar la razón al igual que la vida…

¿Y que es la vida?
Por perdida ya la di
Como al yugo del esclavo
Como un bravo sacudí

Me contesta José de Espronceda en su “Canción del pirata”, con barcos, joyas, mujeres, pero también se la jugaban como un partido de uno de estos, que es muy peligrosos y se necesitan tener una mente enferma para ejecutarlo. Ya que la ruleta rusa con una sola bala en el cilindro de un colt, y te toca a ti, y en el momento menos pensado se escucha el ruido. Y ese ruido que a nuestro oídos; “en ese instante indeciso de las hembras despeinadas; en ese instante en que el grillo cava su mina del alba, García Lorca en el suelo, con una flor colorada, condecorándole el pecho, quedó sin canto y sin habla”, como diría Oscar Castro en su poema “Responso a Federico García Lorca”. ¿En el suelo?, sí, con el español de la generación de 1927; y del suelo muchas veces me escapé de quedar por el mismo motivo que el, cuando “le abrieron el corazón lo mismo que una granada; y el surtidor de su sangre, manchó las estrellas albas”. Por mí no llorarían los ríos de España, aunque me pasara lo mismo que a él, quizás me llorarían por acá y por allá. Porque no hay ninguna máquina inventada por el hombre; que pueda reemplazar la función vital, al igual que la respiración. Solo esa máquina se puede sacar de él hombre, y esto antes solo uno lo encontraba en un libro de naves. En mi mente hay mil lamentos o tal vez no son lamentos eso ni yo mismo lo sé; tal vez pensamientos gestados en mi cabeza, o en la conciencia misma de mí ser. Los mitos, la idiosincrasia, nuestras leyendas y cuentos, los esquemas a seguir voluntariamente; aunque no tanto debido a la manipulación que nos hace el sistema capitalista. Lo impuesto a alcanzar como metas máximas, cuando no es más que otro nivel superior sin duda. ¿Y la filosofía? Valla a saber uno si es ciencia o demencia. O razón mecánica producto de reflexiones de, o, nacidas en la lógica circunstancial de un momento dado. Reacción pensada y acertada de una persona; ante un hecho o el resultado de lo que podría esperar de una persona, en su sana capacidad de enjuiciar. No hay que olvidar que las mentes enfermas, también piensan y razonan hasta para cometer algo inadecuado, ya que lo hacen y nosotros los normales también pero, ¿a qué llamamos normalidad?. ¿A servirnos un helado o una gaseosa, en un día caluroso?, ¿A asistir a la playa, o a una piscina, ese mismo día por la tarde?. ¿A abrigarnos cuando sentimos o tenemos frío; o refugiarnos como cuando llueve? Conductas que se ven por ese ambiente; y qué este nos impone que reaccionamos así. Y yo en este estado; y en esta tumba que me encuentro, muy bien y por lo demás sin sentir el frío abrasador; ni el calor sofocante. Sé que nada puedo ver y es porque no necesito hacerlo; ya que por ahora, estoy quizás en el mejor de los estados humanos, sin tener que luchar ni estar de guardia. Además algunas personas ocupan mucho de su tiempo en esto, y otras no ya que todas son diferentes; y no veo, pero logro divisar una imagen que el otro día capté en una revista, y es la misma de un documental. Es una gran masa de energía; que emana hacia el lugar donde están las estrellas; y se desparrama poco a poco, y al mismo tiempo que de expande, acarrea con esa cualidad la de dar muerte. Porque es el temido hongo atómico, que solo una mente como la del hombre, pude haber engendrado, y su existencia depende de un botón. Un miserable pedazo de plástico, que controla nuestra existencia, y la de mis iguales. ¿Cómo nos puede ordenar una máquina?. No nos quejemos porque el hombre lo ha querido así, y es esta perspectiva en donde los animales, han sido más racionales que el hombre mismo, a pesar de que nos creemos superiores. Porque los animales actúan por instinto; y el hombre al violar a una persona de su sexo contrario, también esta actuando por sus instintos básicos, al satisfacer sus necesidades primarias. De ese modo ya que se actúa como un animal, entonces ¿Cuál es la diferencia? Después de esa imagen veo a un hombre corriendo por la carretera; y se sube a un auto que escapa, quizás llevando en sus manos el destino de la humanidad, y tratando de salvar su vida. Que en el fondo es una generación completa, ya que yo también voy a morir, y estoy aquí en esta tumba en la que nací. Porque si no hubiese sido por ella, yo no podría estar viviendo lo que creo que estoy viviendo; ya que nadie es dueño de la verdad absoluta. Pues los pensamientos viajan a la velocidad de la luz. Y me gustaría estar con ellos, a pesar de que son como burbujas de jabón; que existen en cualquier momento o al mínimo roce, se revientan como quien pierde una ilusión. O la meta máxima a alcanzar en el camino, que amanece al primer llanto; hasta la última respiración. Es cierto que acá estamos de paso, y el pasaje nadie lo tiene comprado, pero realmente ¿Qué estamos haciendo acá?. Supongo que algo más constructivo que pasar el rato, quien sabe si leyendo una revista, de cualquier esquina. Debemos tomar en cuenta que esta tumba tendrá y tiene mucha importancia, en el desarrollo y gestación de mi generación, si me pudriera como carne en descomposición, y no podría pasar el rato. La gente de mi edad, y quizás la que es un poco mayor adora o tiene conceptos, o eslóganes, ideales;y si no los logran cumplir cuando es tiempo de realizarlos, sienten deseos de jugar a la ruleta rusa, pero a la segura, lindo criterio y planteamiento. Yo no tengo esos eslóganes, porque no tengo ningún motivo, para andar fijándome metas limitadas u objetivos a alcanzar. Que terminarían limitándome o pero aun si no lograra limitarme, por el solo hecho de no haberlo logrado, sería un total frustrado. Cuando la vida se hizo para hacer trabajar el cuerpo, y el corazón aún inconscientemente donde la meta descansa; o por lo menos creo que se relaja. Al menos yo sí ya que pienso que es un azar o una suerte de verdad; el que yo me encuentre ahora como estoy. Sería peor estar tapado bajo tierra y cien por ciento en descanso, porque quiero estar en un lugar y verme en el espejo, que diga la verdad como soy con defectos y virtudes. Y ventajas y desventajas, altos y bajos, y así establecer el encuentro conmigo mismo; para poder conocer más y responder a esa simple, pero extensa envergadura; a esa simple pregunta, ¿por qué actué así?. Sabiendo eso conoceré que puedo hacer, y que me destaco y en que pierdo o perderé pudiendo con esto; llegar a un estado espiritual, y superior de una eterna perfección que no será total, porque sí así fuera no sería humano, y lo soy. Por lo menos en apariencia, una perfección que durará los cambios del mundo; de oscuro a claro, y de claro a oscuro, hasta cuando y podré ver el mundo siguiente, y podré saber hasta ese momento en qué estado terrenal me encuentro, y si será mi hora final; que la tuve muy cerca y no fui a la cita, y no fui a la cita por azar del destino. Porque yo no vuelvo al lugar de mi cita, que fue Viet-nam, sí, maldito seas Viet-Nam. Es cierto que estuve allí pero fue porque estaba obligado, o no habría ido igual de o algún modo; tenía que encontrarle sentido a mi existencia. Además que mi país EE. UU necesitaba ser defendido y yo tenía que divertirme con los levantamientos militares, y que hubiéramos ganado la batalla, de hecho en cierta forma sí la gané porque salí vivo, ileso pero vivo. Y yo debería estar sepultado en la extensa vegetación con mis compañeros, si hubiera sido así, hasta el presente no habría hallado mi cuerpo, que ahora yace en un estado tal vez; sea el mejor de los humanos. Pero primero tendría que perder el juicio, para ir a dar la vida por los eslóganes, que son ideales, como el defender la patria; que es un valor, que no es lo mismo. No tengo ni llevaré esos eslóganes. No los uso como si fueran simples mercaderías desechables y tampoco me fijo metas limitadas. A alcanzar los limitados y testarudos como cualquier animal, que no ha sido domesticado. No aguanté los dos años que estuve en la universidad, estudiando ingeniería en armamento; porque me sacaron obligatoriamente para usarlo. No me atrajo nunca la política, ciencia, anti-ciencia, que es el arte de mentir para enriquecerse, y a la hora de la verdad, todos se echan a la dirección opuesta o contraria de adelante. A mí me tocó hacer eso cuando jugaba béisbol, pero la bola no era una pelota común, sino una granada, y yo debía “cubrir las bases o perdía mi equipo, y de paso la vida”. Y sería descalificado por mis oponentes, la vida no es un juego, y muchos juegos hay en ella. Porque la cuestión es ganar al principio, que es el único juego subjetivo e importante para cada uno. Es mejor el sonido musical de Lili Marlen, que el de los morteros, al de los explosivos y las ráfagas y la marcha al avance de los tanques enemigos, ya que ningún instrumento mata, pero cualquier arma sí. Bueno hablo de ellas como el instrumento más ingrato para nuestra sobrevivencia, en el campo que no es el que usan para cosechar, o tomar un baño. ¿Y por qué se me retira esa idea? Ya parece una M-16 de repetición, y cada bala es tan común para mí, a pesar de que no soporto las películas bélicas. Porque son mejores verlas en vivo y en directo; y si me tocaran con el plomo, el proyectil no será falso y tú, salva tu vida. Que aunque no sea sana, la diversión debemos evitar que se vuelva monótona, y así la diversión pase a ser un aburrimiento, y pensar que hay gente que les entra depresión por tener vidas vacías, y ven el futuro no muy claro, esas son las mejores pamplinas que me han hecho reír. Yo que estuve dispuesto a vender caro el cuello, no les veo mayor importancia que un formulario más que llenar, cuando se evalúa mentalmente el resultado de alguna artimaña enemiga, que no funcionó. Y uno se alegra y pude dispararle si aun le quedan balas, o correr para que el enemigo no lo intente de nuevo, y esta vez no se equivoque. Es cierto que en más de algún momento; sentí deseos de romperle la cara al profesor; porque este último no pensaba bien, y yo cansado por los resultados de algo que se evalúa, cuando solo miden conocimiento; o lo que uno aprendió textual de memoria para el examen final. En la universidad cuando estudié ingeniería en armamento, pero me sacaron para usarlo. Mis vueltas de mente siguen, porque cada uno es un mago en lo que hacer, y si no lo hace bien es un mal mago, porque la magia debe ser un arte; y debemos conocer la mecánica de la ejecución, ya que si no es así no seremos artistas ni magos. ¿Qué estará pasando allá afuera? No faltará alguna esquina abierta con clientes, que desconfiarán a lo alcohólico, bajo su poderoso efecto abrasador. ¿Cómo será pasear por los anillos de Plutón? Siempre trate de buscarlos en medio de ese cúmulo de puntos cardinales, que se ven en este estado por fuera o por dentro. Y no se puede ver nada, solo sentir y es imposible ver ya que la oscuridad no solo es exteriormente, sino también interiormente, ya a veces mejor que la de afuera que es la interior. Porque en la ambiental, ocurren cosas que no ocurren en lo esencial, y viceversa. Y viajé pero no llegaré a ninguna parte; y es imposible viajar en esta tumba así como estoy me siento bien, y no tengo miedo Porque no hay de que temer, porque no habrán ataques de ningún tipo ni nada parecido. ¿Cómo es posible y de dónde salieron esos sacos de arena?, ¿Qué están haciendo en el living de mi casa? Veo tres porque no son más y me recuerdan a las trincheras. ¿Querrán hacer una construcción de cemento? ¿Están acá de adorno y decoración? ¡No me gustan en mi casa!. Sirvieron de trincheras algún día, y es cierto que me ayudaron como personas por la utilidad que prestaron; porque en mi casa nadie dispara, o por lo menos eso creo y no son necesarios, al contrario, ¡son molestos!. Es como si se burlaran de mí, uno en cada sillón y la empleada Rosario no está. Y mis padres tampoco y ya me siento un poco débil pero impotente, por su arenosa presencia. Son de color nieve, y alguien tiene que sacarlos o lo haré yo mismo; y me voy con el primero y realmente está muy pesado, y lo debo dejar donde está y tratar con los otros dos, que no me aguantan las fuerzas ni las espaldas; igual cosa con los dos últimos pero parecen ser o pasar igual o menos que el primero. Sí, mucho menos ¡y el primero se me viene encima! Y solo atiné a lanzar un golpe de rechazo, que lo hace retroceder al mismo tiempo que pateo a mi derecha y golpeo el de mi izquierda; no se de donde saqué fuerzas, porque están los tres tumbados en el suelo. Y yo en el sillón recostado y como si me hubieran herido el pecho, tiene iniciales, y no me había fijado en ese detalle al más pesado, “f”, de fertilidades. Porque eso es lo que cae por el agujero que le hizo mi golpe, el otro “A”, de arena y el tercero “O”, de oro. Estos dos últimos más livianos que el primero, luego están seis personas de blanco y se los llevan como si fueran ¿personas?. ¿Por qué las personas sonríen al saludar?. ¿Y lo hacen sin importar lo que antes hayan hecho?. Quizás tienen entendido que cualquier falta la cubre una sonrisa, y así viven tranquilos, yo no me sonrío ante mis errores, los afronto, y por eso tampoco sonrío ni río al saludar. Solo levanto la mano y grito o muevo la cabeza. Y me doy cuenta del aire que entre en mis pulmones, y que ese aire no es humo, ya que ahora no deseo fumar, solo respirar como si fuera a aprender de nuevo a respirar; ya que esta tumba en la que me encuentro algún día fue mi nacimiento; y quizás después del cambio de mundo vuelva a nacer de nuevo; y así aprende de nuevo a caminar, y a llorar. ¿Quién no podría decirme que no me haría bien nacer de nuevo? Pues en el estado en que me encuentro, podría volver quizás a mi nacimiento, y en el líquido amniótico, volverme a formar; pues ahora estoy en el centro de mi matriz, en el mejor de los estados, que ni siquiera tengo seguridad de que comienza o que termina, que se va a volver. Pero si se va o esta terminado, será al mismo tiempo que en el cambio de mundo.

FIN

No hay comentarios.: